Desde el cielo las nubes de noche se incendian con las luces de la ciudad e increiblemente entre tantas luces ninguna eres tu, porque pronto llegarás a opacar cualquier brillo con tu sonrisa y cualquier lucero con tu mirada (con esos ojos azules que tienes que combinan con tus aretitos nuevos jajajaja).
New name, same ol', same ol'.